viernes, 12 de octubre de 2012

Las mentiras de Beyer


Con fecha seis de septiembre, los distintos actores de la educación entregaron al Ministro de la cartera, Harald Beyer, una carta donde exponen los puntos que consideran claves para lograr un sistema de educación equitativo y de calidad.

El Ministro respondió a finales del mismo mes -en una extensa carta- exponiendo la visión del gobierno en este tema, todo sustentado con una gran cantidad de datos duros y afirmaciones categóricas. Particularmente, nos llamó la atención el siguiente fragmento:

(…) no es casualidad que un reciente estudio (Benaabdelaali et. al., 2012) muestre que el nivel de desigualdad educacional entre los más jóvenes se encuentra al nivel de los países desarrollados y que ello ha ido acompañado de un aumento muy importante en promedio de escolaridad, quedando este en niveles similares e incluso superiores al de dichos países.”

La aserción es, al menos, controversial. Mas aún tomando en cuenta las movilizaciones de los últimos dos años. Sin embargo, el ministro no duda y respalda su afirmación con el estudio de un impronunciable académico extranjero. La verdad de la premisa estaría -entonces- justificada, si no fuera porque el estudio citado no afirma lo que Beyer menciona en la carta.

El artículo que cita el ministro lleva por título “A New Data Set of Educational Inequality in the World, 1950-2010: Gini Index of Education by Age Group”. Sus autores, Benaabdelaali Wail, Hanchane Said y Kamal Abdelhak, según señala la Social Science Research Network1, son miembros del Alto Consejo de Educación de Marruecos y académicos de la Universidad de Toulon-Var, Francia. Efectivamente, el estudio señala que los países en vías de desarrollo (sin hacer referencia explícita a Chile) muestran indicadores de desigualdad educacional comparables con los países desarrollados, pero al nivel que éstos tenían en los años cincuenta. Si comparamos los índices actuales, los países desarrollados aventajan a los países en vías de desarrollo en 17 unidades (0.19 contra 0.36) en el índice Gini relativo a desigualdad educacional según el mismo estudio.

No puede ser que un Ministro utilice un criterio arbitrario y falaz para fundamentar la adopción de políticas públicas sesgadas y parciales. Es de conocimiento público que, de acuerdo al Informe presentado el año 2011 por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), de la cual nuestro país es miembro, no sólo somos el país con mayor desigualdad en el ingreso, sino que además, el que tiene mayor segregación socioeconómica en el sistema educativo, en relación a los 25 países que integran dicha organización.

Es inconcebible que una autoridad gubernamental realice una interpretación antojadiza de un estudio internacional para la adopción a ultranza de políticas públicas que responden a una concepción ideológica que excluye los elementos necesarios para comprender en su real dimensión la problemática de la educación. En el fondo, lo que Beyer hace es simplemente disfrazar con un argumento de autoridad una posición dogmática. Este tipo de actitudes revela que el gobierno no está dispuesto a ceder ni un milímetro los principios estructurales de la educación de mercado, al punto de llegar a tergiversar artículos académicos para respaldar el éxito del modelo.

No intente confundirnos con tanta retórica amistosa, señor Ministro. Si desea excluirnos del debate al cual nos invitó con argumentos técnicos, le pedimos gentilmente que esté a la altura del cargo que ocupa, y los respalde debidamente.

Colectivo NODO
Facultad de Derecho, Universidad de Chile

sábado, 8 de septiembre de 2012

¡A pasar del emplazamiento a la disputa real!


El llamado segundo tiempo de las movilizaciones se ha puesto en marcha. El escenario se ha vuelto mucho más dinámico siendo esto patente en las discusiones que estas semanas hemos hecho frente en nuestros espacios, sobre todo con el levantamiento de los primeros paros y acciones masivas. Sin embargo, debemos ser justos con algunos elementos.

No es extraño decir que el escenario se ha dinamizado principalmente por el actuar de los secundarios, quienes en la calle y con la toma de sus establecimientos han materializado un vínculo real entre el contenido y la radicalidad a la hora de proponer su pliego de demandas. Por otro lado, la CONFECH ha volcado su mirada al posicionamiento mediático y el llamado a la expresión universitaria, cuestión que en nuestra Universidad ha tenido una mayor recepción que en el resto del país.Así, eldiscurso de la radicalización en lo universitario se ha traducido en maniobras que en lo concreto, se reducen a acciones pasivas, desplazando la lucha por cambios estructurales a un peticionismo que reacciona frente al ritmo del propio gobierno y los ajustes que el sistema educativo requiere para su perfeccionamiento.

De las “5 exigencias para avanzar hacia un nuevo sistema educacional”
Discrepamos con las voces que ven al emplazamiento como un verdadero avance en términos de articulacióno como el primer emplazamiento ofensivo de los estudiantes. Este documento hoy, marca un retroceso si lo comparamos con las demandas planteadas durante el 2011, desalojando su concreción y la necesaria radicalidad en contenido, limitando, lógicamente, los avances estratégicos en el proyecto de la educación que queremos.

Al plantear la forma del emplazamiento, se asume un contexto político adverso, en donde el movimiento estudiantil se encuentra con menores fuerzas para presionar y por tanto, aquello que debiese ser nuestro soporte ofensivo se convierte en la camisa de fuerzas conteniendo nuestro despliegue como movimiento. El contenido es ajustado al marco de posibilidades de victoria del ahora, no nos abre un camino claro en la lucha, ni apunta a subvertir una determinada relación de fuerzas sino por el contrario,modera en su contenido y función táctica la lucha por la educación.

Además, no prioriza las demandas que debiesen ser el sustento de nuestro proyecto, sirviendo más como un creativo collage que como reflejo de lo que queremos lograr. El frenar los proyectos de ley se pone en el tapete y abre la posibilidad de que una fuerza social, como la estudiantil, adquiera el carácter de mediador de la burocracia legislativa y sirva como botón de pánico de la agenda del bloque dominante¿Y en qué minuto es el propio pueblo quien dirige su lucha para disputar, vencer e implementar la educación que quiere? ¿En qué medida con acciones como esta no somos sino fuerza testimonial que se diluye en los muros del consenso imperante? ¿Cómo arrinconamos la mercantilización y proyectamos nuestra educación?

Del cómo avanzamos
Hoy más que nunca hacen falta claridades que nos lleven a radicalizar la movilización tanto en contenido como en formas. Es decir, que se condigan los lineamientos de la sociedad que queremos, con las demandas y con las formas de movilización que levantamos. La lucha estudiantil no puede acotarse ni dirigirse a resoluciones institucionales, sino que el movimiento debe ser capaz de generar una alternativa que haga sentido al pueblo en su conjunto, imprimiéndole no solo la fuerza moral sino también creando el soporte material de su propia independencia de clase y, por tanto, antagónica a cualquier reproducción del modelo educativo. Es decir, nuestra movilización, nuestras demandas, debe hacerle sentido al pueblo y no a los que dominan.

Debemos disputar con el Ejecutivo en una lucha confrontacional, sin confundirnos con que el parlamento es un espacio, ya que lo único que se puede esperar de aquél es que las fuerzas políticas con intereses en la institucionalidad se posicionen a través del lobby. Esta lucha debe sustentarse en la fuerza de nuestros proyectos y en el crecimiento de la alternativa estudiantil y no en la negación de las acciones del gobierno. Debemos exigir las mejoras materiales para todos los niveles de la educación y debemos ser nosotros, el pueblo movilizado, quien construya el sentido de la educación en la cotidianidad.

Así, la movilización tiene la potencialidad de superar realmente la inercia y la superficialidad con que se forja hoy; nos falta la radicalidad necesaria en las demandas y en el proyecto, de manera que las actividades que se hacen hoy en nuestros espacios tengan sentido y apunten a acumular la fuerza que necesitamos. Por esto, también un objetivo es la recomposición de la organización estudiantil, con un carácter permanente y que selle el vínculo intransable entre nuestra política y el cómo nos desplegamos en el escenario actual y los futuros, aglutinando nuestra praxis cotidiana en la perspectiva de un proyecto popular de educación.

Con todo lo anterior, hoy debemos avanzar en dos ejes: fin de mercado educativo en todos sus ámbitos y fortalecimiento del sistema estatal, cuestión que desaloje al mercado como amo y señor de la entrega de enseñanza.Cuestión aparte merecerá la generación de un proyecto de la educación que el pueblo debe implementar, que dispute con el actual modelo, desde su raíz, que destruya cualquier posibilidad de apropiación privada del conocimiento, y que forje en esa nueva sociedad a los hombres y mujeres que construirán el camino de su necesaria emancipación.

¡Educación digna e igualitaria para una nueva sociedad!

El Despertar – FEN
La Escotilla  – Salud
La Revoltosa – INAP
NODO – Derecho
Plataforma Colectiva – Sociales

jueves, 19 de enero de 2012


MANIFESTACIÓN ESTÁ AUTORIZADA PARA HOY A LAS 18 HORAS

Ley Hinzpeter toma Suma Urgencia y genera nueva protesta universitaria



“Es la clásica respuesta de la derecha cuando está desesperada, cuando no tiene iniciativa, cuando no tiene proyectos comienza con más autoritarismo”. Eso dice el presidente de la Fech, Gabriel Boric, sobre la suma urgencia que tomó este martes el proyecto de Ley que fortalece el resguardo del orden público, más conocida como la Ley Hinzpeter o Ley Anti tomas.
Por eso la Fech hizo un llamado para hoy frente al Palacio de Tribunales para manifestarse en contra de la iniciativa legal que pretende criminalizar las tomas de establecimientos públicos y que, entre otras cosas, cambia la figura penal para quienes participen o hayan incitado desórdenes públicos con penas de 541 días a 3 años de presidio. La marcha está autorizada por la Intendencia de Santiago, según dijo el mismo dirigente magallánico.
“Esta es una señal política muy clara del gobierno y que finalmente pretende forzar esta ley. Es la clásica respuesta de la derecha cuando está desesperada, cuando no tiene iniciativa, cuando no tiene proyectos comienza con más autoritarismo. Y lo que hay en esta ley es una limitación inaceptable a la libertad de expresión, no sólo de los estudiantes sino que de toda la ciudadanía que cada vez está más empoderada y desde el gobierno, o el ministerio del Interior particularmente, se pretende amarrarla. Es muy sintomático del divorcio entre la ciudadanía y el gobierno”, dice Boric.
El llamado ya se regó por todos lados ayer a través de Facebook y Twitter y pretende, según el mismo Boric, “demostrar que los estudiantes seguimos preocupados de lo que está haciendo el gobierno con esta iniciativa que al final del día criminaliza todo lo que hicimos el año pasado”.
“Esta es una persecución de la gente que se movilizó el año pasado. Nosotros condenamos también los hechos de violencia que surjan desde nosotros. No hay que ver la paja sólo en el ojo ajeno. Si han habido destrozos o robos, cosa que debe comprobarse por la justicia y no enjuiciar a la gente sin el debido proceso, bueno, eso también es condenable. Pero lo que se está haciendo acá es hacer pagar a justos por pecadores y no sólo a los estudiantes sino que a los ciudadanos”, señaló.
Sobre el avance de la ley, aprobada en comisión el pasado 21 de diciembre, los estudiantes no descartan recurrir a organismos internacionales para impugnar la iniciativa legal si el llamado a los parlamentarios chilenos a no dar curso al resto del articulado de este proyecto de ley, que además el martes terminó su tramitación en el Senado .
Retiran norma para entregar grabaciones
En tanto, ayer por la tarde el presidente de la Asociación de Corresponsales de la Prensa Internacional, Mauricio Weibel, recibió un telefonazo del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, confirmándole que el gobierno chileno retirará la cláusula del proyecto de ley donde se facultaba a la Carabineros solicitar a los medios de comunicación la “entrega voluntaria” de grabaciones, filmaciones u otros medios electrónicos sin orden judicial, con el fin de identificar a posibles autores de delitos.
En la misma línea, el Círculo de Periodistas de Santiago consideró ayer que el proyecto de ley constituía “el peor atentado al ejercicio del periodismo libre desde la instalación del sistema democrático en 1990″. Según esa organización, la propuesta convertía al periodismo chileno “en un brazo auxiliar de los cuerpos policiales” y colocaba a los informadores que se nieguen a entregar su material de trabajo “bajo el riesgo de ser encausados por obstrucción a la Justicia”.